El valor de un artista

En nuestro país hay mucha gente con talento, muchísima, se sorprenderían de cuanta y también de lo que realmente son capaz de hacer, pero lamentablemente aquí no necesariamente la gente talentosa es la que llega a la televisión o al cine para dar un ejemplo y lo lamentable del caso es que todo ese potencial se pierde mientras en nuestra televisión pasan toneladas de basura que han llegado a un nivel de vulgaridad sin precedentes y todo esto, por el funcionamiento de nuestras sociedades, donde no el más inteligente o el más apto para hacer una cosa es el que obtiene el trabajo, si no el que más tumba polvo, el que tiene más amigos o es hijo de mengano es el que llega, porque aquí todo se mueve con influencias y la capacidad de tumbar polvo y no por lo que debería de ser que es el talento de la gente y su creatividad, pero esto no se queda ahí, para empeorar el caso, en este país el arte tampoco se valora, para ponerles un ejemplo ya un poco extremo en otros países los artistas inclusive los callejeros pueden vivir de su arte, pero aquí ni los supuestos grandes artistas pueden siquiera pensar en vivir sólo de su arte, en resumen creo que esto es el resultado de un desprecio al valor de la creatividad, el cual en cierta forma los mismos que no llegan tienen la culpa de que así sea, porque muchas veces regalan su trabajo, por lo que cometen el peor error posible y es que adquieren la fama de chiripero, además de que por ende la gente entiende que las cosas que haces no son productos de calidad:o es que no han escuchado la frase “Lo barato sale caro”, esta frase es muy educativa a mi entender por que nos habla de la tendencia en el psique del ser humano de entender que si algo es caro es porque se trata de un producto de calidad.
Mi madre en par de ocasiones, me ha dicho cuando quiere que le compre algo en el supermercado que compre tal o cual cosa pero de la cara es decir de la buena.
Con el estudio de esta pequeña frase llegamos a la conclusión de que debemos de darle su justo valor a nuestro trabajo y tratar de que bajo ninguna circunstancia nos estampen con el sello de chiripero, para que algún día se acostumbren a pagar lo que realmente vale el trabajo de un artista.

Tommy Rodríguez